Entre bailes y ceremonias mayas se inauguró, ésta noche, la edición XXXII del Mundial Juvenil de Tenis, antes Copa Mundial Yucatán, en la cancha Estadio "Lorenzo Molina Casares" , donde desfilaron los 252 tenistas de 42 países que intervienen en la histórica ceremonia con el Grado A.
La mezcla de lo misticismo de la cultura maya y lo actual, con canciones de Chayanne, y nuevos danzantes, fueron la parte fundamental de la ceremonia que atrajo a un sin número de invitados.
Los fuegos artificiales iluminaron la noche para dar paso al saque inicial que quedó en manos del representante del gobernador Mauricio Vila Dosal, el director del IDEY Carlos Sáenz Castillo, quien tuvo como rival a la francesa Clara Burel, número uno de la clasificación mundial juvenil femenil.
Como es tradición en la inauguración del torneo tenístico más importante de todo México, los discursos se enfocaron en el esfuerzo que durante muchos años realizó el fundador del evento, Jorge Luis Robleda Moguel, quien estaba en las gradas.
"Estoy feliz de estar un año más con ustedes, y que ustedes estén con nosotros", dijo Arturo Millet Molina, presidente del Club Campestre.
El presidente de la Federación Mexicana de Tenis (FMT), José Antonio Flores Hernández, recordó que hace dos años la Copa Yucatán cumplió 30 años, por lo que merecía el Grado A, lo que para este año se logró.
"Solo cinco torneos hay en el mundo con la nivel del que tenemos en México, y en especial en Yucatán", admitió.
El director del Mundial Juvenil, Jorge Haro Giffenig, señaló que Mérida quedó incluida en una selecta lista, con países como Japón, Italia, Brasil y Estados Unidos.
Agradeció a los más de 252 tenistas, de más de 42 países que llegaron a la competencia.
El alcalde de Mérida, Renán Barrera Concha hizo la declaratoria formal de inauguración, así como felicitó a los organizadores por consolidarlo y hacerlo uno de los cinco mejores torneos juveniles del mundo.
Al final, las fotos y la alegría de ser parte de la historia del torneo.
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