Dos años después de no poder ser sede de la Olimpíada Nacional, hoy Chihuahua recuperó el tiempo perdido y organizó una fiesta con aspectos muy modernos, y aunque hubo fallas, al final se consiguió que los atletas salgan felices por el inicio formal de la máxima justa deportiva en el país.
Alrededor de mil atletas disfrutaron del festejo en el Centro de Convenciones de Chihuahua, en representación de los más de 22 mil deportistas de todos los Estados de la República en más de 43 disciplinas.
Son cinco las sedes del evento: Chihuahua con 17 disciplinas (8 mil participantes), el Estado de México, 10 disciplinas (4 mil 500 participantes); Quintana Roo, con 10 disciplinas (4 mil 500 participantes); Querétaro, con 6 disciplinas (4 mil 500 participantes) y Aguascalientes con una disciplina (900 participantes).
Alfredo Castillo, titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE), dijo que en este máximo evento deportivo Infantil y Juvenil en México, participan 22 mil 400 chicos de entre 10 a 21 años, en la etapa nacional; mil pruebas en la Olimpiada Nacional y 463 para el Nacional Juvenil.
Ante el gobernador del estado, Javier Corral, manifestó que la competencia deportiva desde la niñez empieza a construir sueños de ser el mejor de México, pero éste sueño inicia desde que mejoramos cada día en nuestras habilidades, fuerza y velocidad, así como la emoción en la capacidad del cuerpo y la mente.
Destacó que hay que aprender a visualizarse y decirse yo puedo, yo quiero ser, y cuando el deporte los define por lo que hacen, es cuando nacen los verdaderos atletas, es por ello, que quienes vienen por primera vez a competir en la Olimpiada Nacional a sus 10 años, empiezan a definir su personalidad y seguramente son ya orgullo de sus padres y sus familias.
“Todos los aquí presentes, con seguridad son ya orgullo de sus estados, porque portan sus colores y sus escudos, son el camino de la disciplina, pero ante todo, la gran experiencia y la emoción de una competencia nacional”, manifestó.
Dirigiéndose a los competidores, les dijo que ellos buscarán el triunfo individual y/o colectivo, y en un futuro algunos lograrán competir a nivel internacional, convertirse en jóvenes promesas y orgullo de México y la Olimpiada Nacional es un acontecimiento en el que veremos a más de 22 mil jóvenes mexicanos que han logrado superarse a sí mismos.
Finalmente, el pebetero fue encendido por el medallista olímpico de boxeo, Misael Rodríguez Olivas.
La conducción del evento estuvo a cargo del comentarista Antonio de Valdés, de Televisa.
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