CUANDO LA HIPOCRESÍA REBASA LA REALIDAD EN EL BÉISBOL

No sé, pero en lo personal me sentí mal, después del juegazo que vivimos anoche, gracias al jonrón de Juan Francisco en la 11a entrada, batazo con el que los Leones de Yucatán ahora viajan más que cómodos a León, con ventaja de 2-0 en la serie semifinal del Sur ante los Bravos.
Y es que sin querer ofender a nadie, pero sí reconocer que una gran parte de los asistentes al Parque Kukulcán Álamo nos vimos muy hipócritas al alabar y aplaudir con todo al grandulón dominicano, tras su cuadrangular, cuando entradas antes, incluida la novena tanda, en la que empató el juego a tres carrerad y le dio vida a los melenudos, pensábamos, por lo menos, que era “out por regla”.
Juanito nos dio una “bofetada con guante blanco” con ese soberbio batazo por el jardín izquierdo, porque a pesar de los chiflidos e insultos que recibió un día antes, y muchos más atrás, para ser sinceros, el dominicano hizo lo que pudo para empujar, incluso sin dar de hit, dos de las tres primeras carreras yucatecas, cuando toda la presión estaba sobre de él, pese a que en esos momentos debieron ser expresiones de apoyo y no de rechazo.
Por eso digo que fuimos hipócritas al disfrutar ese triunfo que no merecían muchos fieles aficionados melenudos, que en esta temporada se han excedido en sus críticas, llámese los casos de Jesús “Cacao” Valdez y el mánager Wilfredo Romero, ya que tras sus salidas, buenas o malas decisiones de la directiva, se ha señalado y presionado de más a quiénes llegaron y ahora visten los colores del equipo selvático.
Es cierto que a nadie nos gustó ni convenció la salida del “Cacao”, pero ya es una decisión tomada y no es más que un buen recuerdo del equipo, y ahora toca apoyar a gente como Ricky Álvarez, Yuniesky Betancourt y el mismo Francisco, quienes sí bien han pasado problemas para batear, eso no significa que no luchen por ayudar a ganar al equipo, lo cual al final es lo que importa.
Lo de “Willie”, es otro caso de hipocresía, porque antes de su salida, por lo menos la mitad de los aficionados lo criticaba con todo por su forma de dirigir, por su falta de “tablas” como estratega, pese a que fue mánager del año de la LMB en 2015 y 2016, empero, apenas se dio su salida, surgieron muchos defensores del venezolano, quien seguramente habría querido la mitad de ese reconocimiento cuando estaba al frente de los Leones.
Volviendo al tema de Francisco, estoy seguro de que para todos los aficionados yucatecos, ésta es una buena oportunidad de apoyar hasta la muerte a sus jugadores, y entender que en el béisbol se gana y se pierde, y hay rachas buenas y malas, por lo que toca ser positivo y no hipócrita, deportivamente hablando, y sólo estar cuando las cosas salen bien.
Por eso, lo de hoy es dejar de ser hipócrita, deportivamente hablando, y asistir al Parque Kukulcán para apoyar a los jugadores de los Leones, que al igual que nosotros son seres humanos con problemas y errores, y el que piense lo contrario, pues que lance la "primera piedra".


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