Los más de cinco mil aficionados en el Parque Kukulcán estaban listos para los extrainnings, pero en dos bateadores los Castores de Mérida cambiaron el panorama y concretaron una temporada de debut de ensueño en la Liga Naxón Zapata de Béisbol, al vencer 4-3 a los Reyes de Tizimín, y coronarse campeones, en una final por demás emocionante.
Luego de que el relevista tizimileño Dustin Heredia retiró a sus dos primeros enemigos de la octava entrada, los amantes al "Rey de los Deportes" ya percibían las entradas extra, porque no se veía por donde llegaría la carrera que acabe con el empate a tres.
Sin embargo, con dos outs, el receptor castor José Vidal Castillo se paró en la registradora y rodó hacía las paradas cortas, donde Alejandro Rivero corrió hacía su derecha y de repente se resbaló, sólo alcanzó a detener el batazo y como pudo lanzó a primera base, pero el quintanarroense alcanzó a llegar quieto.
Vidal Castillo, sin ser un gamo en los senderos, se fue a la segunda con wildpitch de Heredia, quien buscó dominar a Carlos Pisté, pero el parador corto castor le conectó un elevado corto al central, donde Dante Arjona tomó de un pique y envió su tiro a la goma.
El tiro fue bueno, aunado a la poca velocidad de Vidal Castillo, auguraba un out seguro, pero en el "choque de trenes", el máscara Carlos Sansores soportó el embate, pero no evitó que la pelota se le caiga y el quintanarroense anote la carrera de la diferencia en la octava entrada.
Para algunos, Tizimín debió darle la base intencional al zurdo Pisté y enfrentar al derecho Alan Arredondo para salir del problema, pero el béisbol no tiene palabra.
La novena la lanzó Eduardo Sabido, quien entró en la séptima con dos outs, y no defraudó al retirar ese último episodio en tres hombres para agenciarse el triunfo.
Sabido relevó a Marcos Castro, quien a su vez lo hizo con el abridor Óscar Rivera, quien lanzó seis entradas con un hit (doble), dos carreras, cinco bases y cinco ponches, así como un golpe.
Perdió Dustin Heredia, quien relevó a Alfonso Pulido, quien no tuvo decisión en seis entradas.
Fue un juego de volteretas y buen pitcheo, ya que los Castores se adelantaron 2-0 en la primera entrada, cuando Mario Lavagnino se embasó con una rola lenta por las paradas cortas, en la que cometió error Alejandro Rivero para anclar en la segunda base y anotó con cuadrangular al jardín derecho de Héctor Castañeda.
Sin embargo, los Reyes empataron en la cuarta, cuando el zurdo Rivera otorgó pasaportes a Néstor Segovia y Alex Rivero, y tras el sacrificio de Luis Borges, la casa se llenó con base a César Caamal, lo que dejó el terreno preparado para que con doblete de Carlos Sansores se iguale la pizarra a dos registros.
Otra vez los locales se fueron adelante 3-2, en la sexta tanda, cuando Sergio Pacheco dio hit y llegó a la goma con sencillo impulsador de Pisté.
Los de Tizimín no se dieron por vencidos y en la parte alra de la séptima entrada empataron el pizarrón a tres. José Luis Graniel anotó con doblete productor de Néstor Segovia.
El resto fue historia, pues un resbalón inoportuno hizo que los Castores tuvieran la oportunidad de lograr su primer campeonato en dos bateadores.
Para el mánager José Caballero fue su segunda corona en la Liga Naxón Zapata, ambas en el Kukulcán, y para el empresario Álvaro Vega Valladares también fue su segundo cetro seguido, pues el año pasado patrocinó a los Reyes.
Posterior al triunfo, Juan Sosa Puerto, director del Instituto del Deporte (IDEY), entregó el trofeo al equipo campeón, mismo que recibió Vega Valladares, acompañado de Caballero, quienes obtuvieron $15,000 de premio.
El lanzamiento de la primera bola lo realizó el gobernador Rolando Zapata Bello, quien estuvo acompañado por diversas autoridades estatales.
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